Escucho el mar. Sentada a unos cuantos pasos de la orilla, pierdo la mirada entre las olas. Algunos niños juegan en el rompiente. Ni siquiera sus risas y gritos de alegría logran distraerme. Me mantengo aquí. Los pies medio sumergidos en la arena, atenta al vaivén que hoy se muestra decidido a batir el fondo […]